LOS ALTOS DE LA MORCUERA

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El pasado domingo tuvo lugar el equinoccio de otoño que es cuando el sol cruza el plano del ecuador celeste en su movimiento hacia el sur. JoLu, José Manuel y Gonzalo quisimos hacer nuestro particular ritual para celebrar este cambio de ciclo de la Naturaleza, como hacían en la antigüedad para dar gracias por las cosechas recibidas en este año. Es el momento donde el día y la noche se igualan. Y como los tres integrantes de la ruta nos habíamos doctorado, de manera totalmente legal, en la Universidad de Miskatonic, siendo el lema de nuestra alma mater: "EX IGNORANTIA AD SAPIENTIAM; EX LUCE AD TENEBRAS”, lo que viene a decir, DE LA IGNORANCIA A LA SABIDURIA; DE LA LUZ A LA OSCURIDAD, era el momento preciso dado que era el día donde la LUZ y la OSCURIDAD se igualan.

Un travesía que nos llevaría del valle del Guadalix al valle del Lozoya, teniendo que cruzar tanto para ida como para la vuelta los ALTOS DE LA MORCUERA, primeramente a través de un PUERTO DE SEGUNDA CATEGORÍA conocido por los amantes del ciclismo como PUERTO DE CANENCIA y a la vuelta a través del PUERTO DE LA MORCUERA, también santo santorum para lo que estamos chiflados por las dos ruedas, que será de PRIMERA CATEGORÍA desde donde lo iniciamos, sumando un total de 1.350 m. de DESNIVEL + ACUMULADO.

Allí estábamos, en la localidad de Miraflores de la Sierra, de muy buena mañana, como nos gusta iniciar nuestros recorridos, para adentrarnos en lo que para algunos, entre los que me encuentro, son de los sitios más bellos de la Sierra de Guadarrama.

0,000 – A 1.102 m. de altura comienza nuestra singladura, siendo el 38,15% del recorrido en parámetros de Alta Montaña, es decir, a partir de 1.500 m. de altura, y aunque estemos en sus parámetros más bajos (horquilla de entre 1.500 y 1.777 m. donde nos moveremos), nuestro organismo experimentará cambios fisiológicos que nos permiten pedalear en este “nuevo y hortil” ambiente. Debido a la hipoxia ambiental (disminución de pO2 en la atmósfera que hace que una menor cantidad de oxigeno atraviese la barrera entre los alvéolos pulmonares y los capilares pulmonares), que nos lleva a tener hipoxemia y por ende hipoxia celular, aparecen toda una serie de mecanismos compensatorios para hacer frente a esta disminución de OXIGENO, como será el aumente de la frecuencia cardíaca, aumento de la frecuencia respiratoria. Por lo que, escapadas como esta a la sierra son buenísimas para ejercitarse en condiciones de menor cantidad de oxígeno y beneficiarte a tu regreso a las condiciones normales, sobre todo si tenemos en cuenta que la base de una buena preparación para el ciclismo son el trabajo de fuerza general y el desarrollo de la capacidad Aeróbica.

0,592 – A los pocos metros de nuestra salida comienza la ascensión en pleno casco urbano de Miraflores. Un trecho que te activa si o si con desniveles que van del 7% al 11% durante 300 metros. Uno no se espera que empiecen tan pronto las penurias.

Comienza un PUERTO DE 2ª CATEGORÍA donde en poco menos de 8,5 Km. tendremos que superar 391 m. de Ascensión + Acumulada, por una carretera de asfalto.

2,017 – Subida hacia la FUENTE DEL BREZAL en la Dehesa del Valle, después de haber subido algo más de 700 m. de distancia al 7% para salir de las últimas casa de Miraflores y hacer una paradita para miccionar pues estamos en muy mala edad y hay que aligerar lastre para los siguientes 6 Km. que nos quedan.

3,862 – HOYA DEL QUIÑÓN un pequeño descanso de poco menos de un kilómetro antes de continuar con las hostilidades.

Nos encontramos con las primeras motos de la Guardia Civil que inspeccionan el trazado donde va pasar el Triatlón, avisándonos que aun tenemos tiempo para completar la subida pero que pronto llegará el pelotón. Lo mejor de todo que tenemos la Ctra. que sube al puerto para nosotros solitos.

4,964 - Volvemos a subir durante 3,2 Km. a una media del 8%

7,861 – CURVA HERRADURA al 8,5% saliendo de ella con pendientes de hasta el 9,6%

8,467 – PUERTO DE CANENCIA o COLLADO CERRADO o HERMOSO a 1.524 m. de altura donde se encuentra un punto de avituallamiento para los triatletas y donde otra moto de la Guardia Civil nos dice que no podemos bajar por la otra parte del Puerto, hacia Canencia. Le informo que no es nuestra intención y que nos desvíamos aquí a la Sierra de la Morcuera.

Completamos la subida antes de que el pelotón llegue al alto. Para los tres es la primera vez que completamos este Puerto, si bien José Manuel y yo habíamos llegado hasta este algo por la cuerda que comunica La Morcuera con este Collado, pero en la práctica había sido una bajada.

El subir en frio y de golpe este Puerto ha pasado factura a alguno de nosotros, que por lo que se ve, tardan más en arrancar que otros, pero vaya cuando ya van rodados… Esta será la primera crisis, por llamarlo de alguna manera, que un integrante de la ruta va a sufrir, pero no es como se empieza, sino como se termina, y que verdad más cierta.

Pero todavía no hemos acabado de subir, salimos a nuestra izquierda por una pista que asciende hasta el Collado del Hontanar por lo que era el Camino que unía Bustarviejo con el Pinar de Rascafría, actualmente GR 10-1. Comenzando por un pequeño repecho al 8% durante 700 m. . Es importante señalar que durante estos 7 Km. encontraremos tres fuentes en el camino.

11,21 – Después de casi tres kilómetros desde el Collado del Puerto de Canencia y haber escalado 136 m. verticales, llegamos a la CHORRERA DE MOJONAVALLE con unas vistas impresionantes de Hoya Vieja y el Valle de Canencia. Nos asomamos para intentar ver la famosa chorrera pero no damos con ella, o bien no lleva agua o hay que bajar algunos metros andando para verla.

15,40 - Alcanzamos el COLLADO DEL HONTONAR a 1.739 m. de altura después de 4,3 Km. con 120 m. de Ascensión + Acumulada, con un par de repechos entre el 6% y 5% que será la única dificultad, por llamarlo de alguna manera, desde que dejamos el Puerto de Canencia.

Comenzamos el descenso hacia la Majada del Cojo que nos llevara hasta el Valle del Lozoya, después de haber ascendido por el Valle de Guadalix.

18,55 – MAJADA DEL COJO que hemos accedido por una de las laderas del barrancón del arroyo de la Peña del Águila. Se trata de una edificación sencilla, construida durante el siglo XX aprovechando la ladera de la montaña y realizada con materiales de la zona. Su planta es rectangular y cuenta con dos alturas con entradas individuales. Originariamente fue la vivienda del guarda forestal, hasta que en 1985 fue rehabilitada por la Dirección General de Arquitectura de la Comunidad de Madrid, para dedicarla a refugio de montaña. En la actualidad esta instalación dependiente de la Comunidad de Madrid se encuentra cerrada, aunque en los últimos años ha formado parte de la red de albergues y refugios de la región en activo. Encontraremos una fuente por si se necesita recargar nuestros bidones.

Continuamos con el cada vez más frenético descenso hacia el Valle del Lozoya por las tierras de Moroviejo, por una pista serpenteante denominada Camino de la Iruela, bastante ciclable aunque en algunas partes hay que tener mucho cuidado. Al día siguiente tendremos agujetas en los músculos hombros, bíceps y tríceps.

25,94 – Después de 10,43 Km. descendiendo un Desnivel Negativo Acumulado de 615 m. llegamos a orilla del río Lozoya a 1.099 m. de altura, donde tenemos problemas para cruzar el puente que nos comunica con la población de ALAMEDA DEL VALLE. El paso se encuentra atestado de caballos que se niegan darnos paso. La alternativa es mojarnos los pies cruzando el río. Al final el ruido de un vehículo a motor hace que las “bestas” dejen paso. [ver vídeo en post anteriores]

Estas monturas que custodiaban el paso del puente me ha recordado a los CABALLEROS QUIÑONEROS. El valle fue siempre un lugar fragoso, solitario y aislado donde los bandoleros encontraron en las fragosidades de sus bosques y en las notables dimensiones de sus solitarias montañas un lugar estupendo para actuar u ocultarse. Es en la época de la reconquista por parte de los segovianos cuando se sitúa una leyenda bien conocida, que nos habla de la justicia que impartían, a medio camino de la historia y de la tradición, los conocidos como caballeros quiñoneros.

“Los caballeros quiñoneros eran considerados el escalón más bajo de la caballería, sobre la que se organizaba la oligarquía segoviana”. En cierta manera nos sentimos identificados con ellos, porque nosotros no somos unos caballeros… digo ciclistas PRO, estando por debajo de ellos en muchos aspectos, pero no a la hora de disfrutar de nuestras bicicletas.

Al llegar a la población enlazamos con el CAMINO NATURAL DEL VALLE DEL LOZOYA que nos comunicara con Oteruelo del Valle. Un precioso camino muy bien acondicionado como vienen siendo la RED DE CAMINOS NATURALES.

27,20 – Entramos en OTERUELO DEL VALLE otra de las poblaciones que tenía una de estas CUADRILLAS o QUIÑONES para proteger a los repobladores de los bandidos “moros”, con un supuesto derecho de “horca y cuhillo” con la que impartían justicia.

“(…) todos los días de fiesta cuando la ciudad y pueblos asistían a los sacrificios, corriesen la campaña contra los moros, que emboscados en las sierras, aguardaban aquellas horas para sus acometimientos y robos”.

29,63 – Siguiendo este Camino Natural llegamos a Rascafria donde nos topamos con la carrera que hemos dejado en las alturas kilómetros atrás. Teniendo que bajar de las bicicletas y seguir a pie por sus aceras.

30,11 – FUENTE junto al arroyo del Artiñuelo en medio de la población de Rascafría donde nos tomamos el platanito y esta vez sí, recargamos agua.

30,93 – Cruzamos el río Lozoya, conocido en esta parte como río de LA ANGOSTURA, por el PUENTE DEL MOLINO DE BRISCAS.

Desde el Km. 26 llevamos el camino por donde eran conducidos los reos por estos llamados Quiñoneros a hacia la orca, o mejor dicho hacia la CASA DE LA HORCA, que todavía existe, donde vivía el verdugo que era el que al final les daba matarile.

“Fundaron también los quiñones, esto es, cien lanzas de a caballo que divididos en cuatro escuadras de a 25, todos los días de fiesta cuando la ciudad y pueblos asistían a los sacrificios, corriesen la campaña contra los moros, que emboscados en las sierras, aguardaban aquellas horas para sus acometimientos y robos".

32,48 – PUENTE DEL PERDÓN, ya hemos comentado que estos quiñoneros podían juzgar y administrar justicia en este territorio inmediatamente, e incluso la pena máxima, sin necesidad de consultar con la corte. Las ejecuciones se cumplían en una casa llamada ‘Casa de la Horca’ a cinco kilómetros del Monasterio del Paular, entonces es cuando entra en juego el citado puente. Antes de partir para la casa de la Horca se les revisaba la sentencia a los delincuentes a los que algunos se perdonaba pero sin que estos lo supieran todavía. Se continuaba el camino y cuando llegaban al puente, a los que se les había perdonado se les dejaba sueltos, y cruzaban el río en libertad, de esta benevolencia le viene el nombre a dicho puente.

Parece ser que nosotros hemos sido absueltos pero todavía nos quedará pagar la penitencia de subir hasta el Puerto de la Morcuera. Comienza poco a poco nuestra ascensión a lo que será a uno de Primera Categoría, desde la última vez que cruzamos el Lozoya en el Km. 31. Este camino que llevamos esta muy concurrido al ser el que lleva a la CASCADA DEL PURGATORIO, por lo que tendremos que ir sorteando a transeúntes hasta el Km. 35,58 cuando nosotros seguimos recto y el camino a la cascada sigue a nuestra izquierda.

36,41 – Curva pronunciada a izquierdas con los desniveles medios que llevamos unos kilómetros atrás soportando entre el 5% – 6%. Hay que reconocer que la subida no tendrá aberrantes pendientes, y no en ningún caso habrá que tirar de plato pequeño (para aquellos que tengan con este menda todavía tres platos) pero si son una continua subida que se prolongan durante mucho tiempo y pasan factura como así fue.

Subiendo hacia EL GOLLOTE aparece LA CRISIS para un nuevo integrante de grupo, si durante la subida a CANENCIA afecto a uno de nosotros, ahora está minando a otro de nosotros. Suerte que como toda crisis llega a su fin. Se dice el pecado pero no el pecador pero en este caso puede decirse que fui yo el afectado de este mal que me duro 5 Km. de remonte de lo que por si solo es un Puerto de 3ª Categoría, y si bien salí de ella quede marcado.

41,10 – 1.528 m. de altura en EL GOLLOTE comienza un descanso que consiste en descender unos kilómetros, no sé que hubiera sido mejor, para tenerlos que recuperar luego.

42,30 – Comenzamos de nuevo a subir, a una media del 6% para cubrir por si solo otro Puerto de 3ª Categoría que nos llevará hasta el Refugio de la Morcuera. En estos primeros metros el miembro del grupo que falta por atizarle EL TÍO DEL MAZO, es víctima de la Crisis que nos llevaremos cada uno a casa. La fuerza con la que había hecho gala durante toda la ruta ha desaparecido, ¿cómo es posible? Pero es así. Ya llevamos muchos DESNIVEL POSITIVO ACUMULADO a nuestras espaldas y claramente tiene que pasar factura.

Estos kilómetros además son muy pesados, con curvas que continúan en subidas, y a cada vuelta otra más.

46,20 – Llegamos al REFUGIO DE LA MORCUERA, a la Carretera del Puerto. Estos últimos kilómetros que faltan para coronar serán por asfalto. Bajo unos pinos un pequeño respiro antes de continuar con cuidadín porque volvemos a cruzarnos por la carrera y aunque bajan por un de los carriles, los ya rezagados hay que ir con cuidado.

46,77 – Totalmente desilusionado y muerto de sed al encontrarme la FUENTE COSSIO sin un chorro de agua. Hacia un par de semana corría un triste chorro pero ahora ni eso. Pues nada a “tirar palante”.

47,50 – Coronamos el PUERTO DE LA MORCUERA a 1.796 m. de altura. Cuando el muerto viviente que llevábamos desde el Km. 43 estaba atrás y yo celebraba el coronar primero, me pasa como un abanto por la izquierda, no pudiendo reaccionar y llevándose el PREMIO DE LA MONTAÑA. ¡NUNCA SUBESTIMES A UN ANIMAL HERIDO!

Comenzamos unos de los más vertiginosos descensos que he realizado por asfalto hasta RASCAFRÍA, el programa era bajar por la pista forestal pero el tiempo se nos ha echado encima y decidimos ganar tiempo y bajar por la carretera como hacen muchísimos ciclistas por este carismático Puerto.

56,27 – Después casi nueve kilómetros de caída libre, alcanzamos donde hemos dejado los coches. Con la satisfacción de llegar sanos y salvos. Nos esperan unas cervecitas 0,0 heladas en la neverita portátil que han sido todo mis pensamientos desde que encontré vacía la FUENTE COSSIO.

Volvemos a disfrutar de la compañía de José Luis (JOLUDELATO) uno de los mejores compañeros de ruta que te puedes echar a la cara.

YO 100% MOTOR DE SANGRE, PORQUE YO PUEDO