Hoy José Manuel y yo nos hemos liado la manta a la cabeza y no hemos chupado nuestro primero PUERTO DE CATEGORÍA ESPECIAL o como dicen los franceses hors catégorie y que STRAVA reconoce como HC, toda una serie de concatenación de "muros" con picos de hasta el 23% durante poco más de 2 horas, desde el arroyo Guadamora entre Castillo de Bayuela y Hinojosa de San Vicente, hasta el Monte las Cruces donde se tiene una de las mejores vistas del Valle del Tietar y la Sierra de Gredos, un monte que ha reemplazado el culto a antiguos dioses por los nuevos, los tecnológicos. La subida al PIÉLAGO es mágia pura.


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Como estaba programado tocaba acercarnos a la Sierra de San Vicente o del Piélago de San Vicente en la provincia de Toledo, lindando con Ávila, ese paraje ameno, salutífero y lleno de paz como registraban las crónicas de los viajeros desde tiempos inmemoriables, y donde podríamos disfrutar de un Puerto de esos de 1ª Categoría, con rampas que hacen temblar el misterio. Pero a última hora de la noche decido darle un poco más de “picorcito” y en vez de remontar solo hasta el Puerto del Piélago, no estaría de más, continuar hasta remontar a la mayor cumbre de esta sierra toledana, que no es otro que el Alto o Monte de Cruces con sus 1.373 m. de altura, y desde, dicen, hay unas vistas espectaculares del Valle de Tietar, esto supondrá añadirle una categoría más al remonte que llevaremos.

Son las 07:30 de una fría mañana de finales de Enero, que da buen día según los pronósticos, como así fue, iniciamos un periplo de poco más de una hora (94 Km. de distancia) para alcanzar la población de Castillo de Bayuela, lugar de inicio y final de la ruta cicloturista del domingo.

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0,000 – Dejamos el coche a la entrada al pueblo, 08:30 de la mañana, con menos frio del que esperábamos quizá porque este lugar este guardado por la parte del cierzo con dos cerros grandes, y más arriba una sierra mayor (la de San Vicente), y comienza nuestro recorrido por “la mejor tierra de Castilla, que no es otra que la Tierra de Talavera de la Reina” como escribió Cervantes en una de sus obra. Subimos por las calles de Castillo de Bayuela, pasando por su plaza que conserva una de las picotas o rollo judicial más bonitos de la comarca. Dejando al norte el Cerro del Castillo que da primer nombre a la población, un CASTILLO de fabrica romana, reutilizado por musulmanes y después por cristianos.

0,810 – Salimos por el Cº que comunica con el Arroyo de Martín, comenzamos a ver las primeras balizas que señalan uno de los caminos de este país barrancoso, de valles y hondonadas. El origen del topónimo Bayuela / Vayuela vendría del nombre que le pondría los musulmanes que no sería otro que el de “VALLE DE ALA o DE LAS BENDICIONES” por los innumerables manantiales/veneros que hay en los valles que forma esta serranía. Originariamente el pueblo estuvo en el Cerro del Castillo y actualmente se encuentra ubicado en el lugar conocido como PAJARES por encontrarse labranzas y casas “pajizas”.

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1,613 – Comienza un descenso por el llamado ATAJO, muy roto y pedregoso con tramos al -18% que hace que tengamos que echar el pie a tierra y continuar a pie unos metros para evitar algún disgusto. Todo un disfrute para los amantes del ENDURO. La próxima vez llegaremos al barranco del Guadamora por el Cº de Cardiel de los Montes a Hinojosa, que sale de la Ctra. que une Castillo de Bayuela con Talavera, evitando así tener que bajarnos de la bici. Por el valle donde los romanos construyeron una pequeña presa para regar las huertas de los villorrios que explotaban estas tierras.

2,172 – Cruzamos el Arroyo de Martín y el de GUADAMORA (de la Torre) afluente del río Alberche en el que el vocablo “mora” estaría relacionado con la idea de “monte, collado redondo, cabezo”, iniciándose así el puerto de Categoría HC, vamos Categoría Especial o como dicen los franceses Hors Catégorie, nunca mejor dicho el lema SUFRE, DISFRUTA, VIVE. Un sendero entre vallados de piedra, en ocasiones terrado, en otras hormigonado dan inicio al remonte, con trazas de Camino Romano.

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2,771 – Sin tiempo para calentar las piernas, llegamos a una parte dura con rampones de hasta el 20%, conocido como LAS REVUELTAS, una serie de “S” que salvan el vallecillo del Guadamora y hasta alcanzar la población de HINOJOSA DE SAN VICENTE. Casi 500 metros donde tendremos que tumbarnos sobre el manillar de la bici para que no se nos levante, con buena cadencia del plato pequeño. Facilita la cosa el hormigonado rallado que muestra la impresión de neumático de bici de algún ansioso que quiso subir este “murete” con hormigón recién echado. Pues nada, buen oficio y pá lante.

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3,806 – Un pequeño respiro al alcanzar las primeras calles de Hinojosa, pero solo serán unos metros, pues comenzaremos a atravesarlo de Este a Oeste por sus empinadas calles. Decían las crónicas que desde Castillo de Bayuela a Hinojosa había media legua de mal camino, que por ser por cerros no puede ir derecho del todo punto, como bien hemos padecido.

4,592 – Conectamos con la llamada SENDA DE VIRIATO, la GR63 que se pega un rulo por esta comarca, y que utilizaremos unos kilómetros para dejarla y posteriormente recuperarla.

Dice la tradición popular de esta comarca que el lusitano Viriato que tuvo en jaque a la mismísima Roma, tenía su campamento en una de la cumbres de la Sierra de San Vicente, concretamente el Cerro de San Vicente que iremos rodeando por su cara Oeste, de ahí que se haya creado una “senda” con su nombre, aunque yo soy de los que piensa que el “pirata” de Viriato, que se dedico a arramplar con las riquezas de los carpetanos entre otros pueblos de la Celtiberia, tuvo su campamento en la orilla izquierda del río Tajo, más en los Montes de Toledo, por la sencilla razón que esta serranía estaba ocupada por los vettones, teniendo por ejemplo un castro o oppidum en el Cerro del Castillo a cuyos pies esta Castillo de Bayuela, y no creo que fuera buena idea montar su campamento de invierno con unos vecinos que rendían culto a los bueyes (de piedra) de Gerión. Un lugar fronterizo entre vettones y carpetanos, que estos últimos tenían su capital en Toledo. Pero fuera lo que fuera siempre quedara la leyenda que por estos caminos que ciclamos sirvió de refugio a uno de los iconos de caudillismo en la península ibérica.

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5,512 – Comenzamos a subir por la ladera NorEste de la Cabeza Bermeja, buenos rampones “vive Dios”, a nuestra derecha el barranco que forma el arroyo Guadamor/a / illa que separan Cabeza Bermeja del Cerro de San Vicente.

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7,712 – Dejamos a nuestra izquierda la Senda de Viriato y seguimos nuestro remonte entre los barranco que forman los arroyos NAVATEJARES y nuestro conocido GUADAMORILLA. En un momento de nuestra subida, en el Km. 8,403 hay un pequeño falso llano en las inmediaciones del CERRO ALCORNOCON desde donde se tienen unas vistas impresionantes de la Sierra de Gredos a nuestra izquierda y en donde aprovechamos hacer una pequeña parada después de toda una serie de rampas que hemos ido salvando. Recuperado el resuello continuamos con el remonte.

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10,41 – Después de otra concatenación de pendientes por la ladera oeste del Cerro de San Vicente llegamos a la explanada a pocos metros del convento del Carmelo del Piélago, que fue víctima de la Desamortización de Mendizábal y de una de las guerra civiles que vivió nuestra España, conocidas como Guerras Carlistas durante el s. XIX. Un lugar, aun en nuestro tiempo, desierto entre sierras / lugar deshabitado entre sierras, en este caso MONTES (al encontrarse entre el Monte de Cruces, Monte Pelados/as y Monte de San Vicente), dígase PIÉLAGO con advocación a la Ntra. Sra. de los Angeles (muy de los conventos del Carmelo), también fue conocida como Virgen del Piélago. Una virgen “morena” que primitivamente estaba en el convento que hubo en el Cerro de San Vicente, y por la que dicen, el castillo fue de TEMPLARIOS sujetos a la encomienda de Montalban, antes islámico que mando construir Miramolin al-Nasi, hijo de Moamat, sin ningún documento que lo corrobore, salvo su mención en la Relaciones Topográficas de Felipe II se hace de Castillo de Bayuela. Es cierto que entre el alto y el castillo hubo un pequeña abadía regentado por monjes de la Orden de San Rufo a partir de 1156/1158 Sin duda en este monte hubo un ancestral culto a la DIOSA-MADRE en cerro que vierte sus aguas al valle del Alberche, es conocido, el culto a Ceres en la Tierra de Talavera.

En otra ocasión haremos una visita más exhaustiva a los restos del convento y subiremos al Cerro / Monte / Alto de San Vicente para visitar la cueva donde la leyenda señala se refugiaron San Vicente y sus hermanas Sabina y Cristeta antes de sufrir martirio en Ávila durante la persecución de Diocleciano a finales del s. III d.C..

A partir de aquí, esta parte del puerto HC se suaviza, digamos que hemos completado, hasta ahora, un 1er. Categoría y solo quedan unos pocos desniveles positivos de acumulado para que salte a Categoría Especial.

11,03 – Tras unos metros por la Ctra. que une Navalmorcuende con el Real de San Vicente en el Alto del Piélago, volvemos a encontrarnos con la GR63 – SENDA DE VIRIATO pasando un paso canadiense, un camino que conduce al Valle del Tietar y que durante unos cientos de metros supondrá un respiro a tanta subida. A nuestra izquierda comenzamos a ver el Monte de Cruces con sus antenas.

12,53 – Tomamos el camino que sube a la izquierda, pasando otro paso canadiende tras un pequeño repecho.

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13,51 – Una serie de revueltas entre el 8% y 12% nos acercaran al Cruces.

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14,98 – Coronamos el MONTE DE CRUCES con una fuerte ventolera. Un equipo antenistas que estaba haciendo unas reparaciones, ha tenido bajarse ante el peligro que conlleva. La vista que se tienen son inenarrables, todo el Valle de Tietar a nuestros pies, con la Sierra de Gredos al otro lado del valle, magnífica estampa. Por otro, lado el Valle del Alberche con el Cerro de San Vicente en primer término. Momentos de platanito y mandarina.

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Comenzamos el descenso, con un aire que hace pensarse el echarse unas piedras al bolsillo.

20,11 – Volvemos por la cancela que habíamos tomado a la ida, junto a la Ctra. del Puerto del Pielago. Esta vez, giramos a la izquierda en dirección al Real de San Vicente.

20,25 – Salimos del asfalto a los pocos metros y tomamos el camino que baja la Vertiente del Arroyo Bonal con pendientes de hasta el -17% que a mi se me hace más duro incluso que la ascensión. A los pocos metros de iniciar el descenso meto la rueda en una rodera y caigo despedido al suelo, sin consecuencias, salvo el dolor al amor propio, que recuperaré después de la sienta que me pegue en casa. Hay varias posibilidades de descenso, nosotros escogemos la que llega hasta La Majallona donde llegaremos al asfalto.

20,38 – Por problemas de tiempo decidimos tomar la Ctra. CM-5001 dejando el off-road y así volver rápidamente donde tenemos el coche.

26,17 – Rápidamente llegamos al REAL DE SAN VICENTE, que debe su nombre al árabe aryal > real que significa «sitio donde está acampado el ejército», que dieron en época califal ha esta tierra, denotando su importancia estratégica.

31,33 – Entramos en la primeras calles de Castillo de Bayuela y pasamos junto a la plaza que alberga el VERRACO y TORO que originalmente se encontraban el Cerro del Castillo, según las crónica hubo dos toros que flaqueaban las puestas de entrada al castro vettón.

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31,46 – A las hora prevista 12:30 estamos de regreso donde hacía casi cuatro hora había iniciado nuestra singladura por este hermoso país. A la 13:30 estaremos de vuelta en casa, con la satisfacción de haber disfrutado de una estupenda ruta ciclista y superado nuestro primer Hors Catégoríe.

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